Bibliografía

*La bibliografía:

La selección de la bibliografía debe ser un espejo donde el individuo vea reflejado el problema existente y busque las soluciones al mismo, aunque hay que tener en cuenta que un libro puede originar distintas reacciones en función de las vivencias personales de quien lo lea y, en ocasiones, puede resultar interesante la asociación de imágenes al texto, como en los cuentos infantiles, por tener un mayor efecto terapéutico ; ha de ser completa pero breve, para asegurarse de que va a ser leída por el paciente, debe ser sencilla de leer, no ha de ser excesivamente técnica, procurando que sea clara y amena.

*El paciente:

Debe saber leer y además tener habilidades de lectura que sean adecuadas al nivel de lectura necesario para abordar el manual recomendado y, por supuesto, leer lo señalado por el terapeuta.

Durante la lectura el individuo puede pasar por una serie de fases como son :

  • Identificación con el personaje y los hechos de la trama.

  • Involucración emocional con liberación de emociones.

  • Auto-reconocimiento. Identificación de las posibles soluciones a sus problemas.

Por último, y no por ello menos importante, ha de atender y participar en el debate con el terapeuta y los demás componentes del grupo.


*El terapeuta:

Los terapeutas deberían estar al día en cuanto a publicaciones que pueden resultar adecuadas a pacientes con diferentes tipos de necesidades, que puedan ser útiles y estar actualizadas; determinar las necesidades particulares de la situación, establecer los objetivos de la terapia, seleccionar los libros que reflejen la situación o sentimientos experimentados por el paciente, realizar las selecciones adecuadas al nivel de lectura, fomentar la lectura y la re lectura, hablar sobre los sentimientos expresados por los personajes adecuando el lenguaje durante el debate al nivel cultural del paciente y evaluar la consecución de objetivos .